
El agresor irrumpió a primera hora de la mañana de este miércoles en una escuela de Winnenden, localidad cercana a Stuttgart.
Tenía 17 años y era antiguo alumno del centro. Vestía un traje de combate negro y disparó contra los alumnos. Allí mató a 13 personas.
Trece personas, la mayoría estudiantes, han muerto a primera hora de este miércoles en el tiroteo protagonizado por un joven armado en un instituto de Winnenden, de 27.600 habitantes y en el estado alemán de Baden-Wuerttemberg, situado en el sur del país y a unos 20 kilómetros de Stuttgart. También hay varios heridos aunque no se ha confirmado cuántos. El agresor escapó del tiroteo a pie y se dirigió al centro de la ciudad.Según ha informado la Policía alemana, el agresor es Tim K., un joven de 17 años y antiguo alumno de la escuela (la dejó hace dos años), que escapó a pie tras el ataque, por lo que se organizó un amplio dispositivo de búsqueda y captura.
Finalmente, poco después de la una de la tarde, se confirmó que los agentes mataron al asaltante durante otro tiroteo en un supermercado de la localidad de Wendlingen, situada a 40 kilómetros del lugar de la masacre y al que llegó tras secuestrar al conductor de un vehículo, que liberó posteriormente, y tras una espectacular persecución de tres horas. En este nuevo tiroteo, murieron dos transeúntes y resultaron heridos dos agentes.
La tragedia empezó a las 9.30 horas cuando el joven irrumpió en la escuela vistiendo un uniforme paramilitar negro y disparó con un fusil ametrallador de manera indiscriminada en el centro de enseñanza, llamado Albertville y que cuenta con unos mil estudiantes. Los fallecidos son nueve alumnos y tres profesores además de un jardinero que estaba en el recinto de un centro psiquiátrico próximo. Fue entonces cuando el instituto fue evacuado y se cerraron las salidas de la ciudad. Mientras, los psicológos de la Cruz Roja atendieron a los alumnos conmocionados por lo ocurrido, así como a la familia de las víctimas.
Tras lo sucedido, los agentes entraron en la vivienda del chico y comprobaron que el padre guarda una gran colección de armas. La madre fue también interrogada.
Alemania, una historia que se repite
Lo ocurrido en Winnenden desgraciadamente no es una novedad para los alemanes ya que han vivido algún suceso similar en el pasado. El más grave ocurrió el 26 de abril de 2002, cuando un joven de 19 años mató a 16 personas y se suicidó poco después en venganza por su expulsión de un instituto en Erfurt, al este del país. Los fallecidos fueron la subdirectora, doce profesores, una secretaria y dos alumnos.
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